Los colores le dan dimensión y el toque interesante al paisaje. Los colores brillantes como el rojo, amarillo y naranja tienden dar la sensación de acercarse hacia uno así como a hacer que los objetos luzcan también más cerca. Los colores fríos como el verde, azul y los pasteles parecieran alejarse y hacer que los objetos luzcan más lejos de lo que están.

El gris, negro y blanco son considerados colores neutrales y se los suele aprovechar en los fondos sobre los cuales luego usar colores más brillantes que contrasten. Sin embargo, para aumentar la sensación e profundidad en un paisaje, usted puede usar colores más oscuros y plantas de textura más densa delante, y luego los colores más claros y texturas más fina en el fondo.
Los colores también pueden usarse para dirigir la atención hacia un área específica del jardín. Un elemento cálido y brillante inevitablemente resaltará si se lo coloca entre otros más fríos y apagados.
Muy buen consejo. Por ejemplo, para las paredes del jardin de mi casa he utilizado un verde oscuro, lo cual le da una sensacion de profundidad y lo hace parecer mas grande de lo que realmente es (lo cual no es mucho) 🙂