A la hora de decorar paredes existe al alcance muchas opciones, papel para empapelar, tapices, cuadros, fotografías, etc. Hay una variante que cobró fama en los últimos tiempos y que además se caracteriza por ser económica y fácil de instalar. Se trata de los paneles de tela.
Como todo accesorio que se va a adicionar a un sitio el paso inicial es determinar si combina con el resto de los objetos. Para determinar qué tela será la más apropiada para el lugar se puede tomar un trozo de ella y ver si combina o no en el sitio en donde va a ser instalada. A veces la iluminación propia del lugar produce cambios en las tonalidades, es mejor realizar estas pruebas antes de la instalación del panel para así de ser necesario se elige otra tela. La gran ventaja de este ornamento es que se puede armar de acuerdo al presupuesto de cada persona, si no se posee suficiente dinero uno mismo puede confeccionar el panel a partir de retazos viejos.
La instalación es sumamente sencilla sólo se precisa de un soporte, una plancha de madera muy liviana o un soporte como el utilizado por los tapices.