Usted necesita pintar la casa. Quizás instalar un lavabo en el baño. O tal vez sea tiempo de reemplazar la pileta inflable que yace en el jardín por una de plástico. Pero lo que debe preguntarse es… ¿puede realizar usted la tarea?

Bueno, depende. Para poder responder esta pregunta, deberá responderse primero otras tres preguntas:
• ¿Poseo el dinero suficiente?
• ¿Poseo el tiempo necesario?
• ¿Tengo las habilidades requeridas?
¿POSEO EL DINERO SUFICIENTE?
Un factor importante para cualquier mejora o reparación del hogar es si puede efectivamente costear la contratación de un profesional arquitecto para que haga el trabajo, o por lo menos, lo ayude haciéndolo. Pagar por la mano de obra puede sumar mucho al costo de cualquier proyecto, llegando a duplicarlo en ciertos casos. ¿Verdad? Como la respuesta a tantas preguntas – depende…
Es posible que tenga que gastar incluso más dinero si no contrata a nadie. Si la tarea la realiza usted, puede que tenga que comprar o alquilar herramientas para poder lograrlo. Y quizás gaste mucho más dinero comprando las herramientas de construcción. Muchos contratistas consiguen precios más baratos comprando al por mayor o conocen a algunos de los distribuidores. Quizás usted pague precios minoristas mientras que su contratista podría conseguir precios mayoristas. Finalmente, si sus habilidades no están a la altura, y luego tiene que pagarle a un contratista para que arregle los errores que usted cometió, sus costos pueden despegar hasta el techo (¡justo ese techo que usted intentaba reparar!).
Siempre considere los costos cuando esté por realizar alguna remodelación por su cuenta. Sin el acceso a las herramientas adecuadas, a descuentos especiales, o el conocimiento de cómo hacerlo, puede que necesite a un profesional para que realice la labor por usted. Si se trata de un proyecto simple, usted posee las herramientas necesarias, y tiene el conocimiento, entonces contratar a alguien para que lo haga por usted es una jugada incorrecta.