Usted ha esperado once meses para la llegada de su potrillo y finalmente está aquí. ¿Qué es lo que se debe hacer para asegurarse de que su comienzo en esta vida sea lo mejor posible?
Asegúrese de que el potrillo puede succionar. Una cría normal debe poder ponerse de pie y tomar la leche de la madre dentro de las primeras dos hora luego del parto. Si el mismo está teniendo problemas para succionar o no se muestra lo suficientemente interesado en hacerlo, puede que tenga serios problemas. Los mejor en ese caso es llamar a un veterinario especialista en caballos lo antes posible.
El calostro es la primera leche de la madre y es muy importante. El mismo contiene todos los anticuerpos que su potrillo necesita para estar protegido contra posibles infecciones y enfermedades. Un potrillo recién nacido necesita entre un litro y medio y dos litros de calostro de buena calidad. Es muy importante asegurarse de que reciba suficiente del mismo.
Si el potrillo no quiere succionar, usted puede tomar el calostro y dárselo en una botella o el veterinario puede intentar dárselo con un tubo que vaya directo al estómago. En caso de que la madre no produzca calostro, hay sustitutos disponibles que pueden servir.
Los intestinos del potrillo solo pueden absorber el calostro durante las primeras 24 horas aproximadamente. Luego de ese plazo, el veterinario puede intentar hacerle una transfusión de plasma para elevar el nivel de anticuerpos si es necesario.
Asegúrese de que su potrillo pueda eliminar el meconio. El meconio el primer deshecho sólido y oscuro que se formó mientras la cría permanecía dentro de su madre. Algunos potrillos pueden tener dificultades para eliminarlo, sobretodo si tienen pelvis estrechas, para lo que su veterinario puede recomendar un enema.
Es importante que un veterinario revise a su potrillo apenas nace. El mismo puede darle una inyección para el tétanos que es de especial importancia si la madre de la cría no ha sido vacunada recientemente. También puede tomarse una muestra de sangre para asegurarse que los anticuerpos necesarios han sido incorporados.
Los probióticos pueden ser de ayuda para prevenir posibles diarreas que suelen ocurrir a los 10 días de edad. La misma puede deberse a problemas en la adaptación del sistema digestivo a la vida fuera del vientre de la madre, y no por un problema hormonal de esta última.
Siga con cuidado la evolución de su potrillo. Incluso aquellas crías que parecen saludables, más tarde pueden tener algún tipo de problema. Los potrillos deben estar cada vez más radiantes y activos conforme pasan los días. Un signo significativo de infección es cuando el potrillo permanece apático o duerme la mayor parte del tiempo.
Con cuidado y atención desde edades tempranas, usted y su nuevo potrillo podrán vislumbrar un largo y feliz futuro juntos.