Un abridor automatizado de puertas de garaje es una pieza de equipamiento utilizado para abrir y cerrar las puertas del garaje. La mayoría de los modelos se controlan de manera remota. Los abridores de puertas de garaje son simples pero extremadamente útiles. Tanto así que es difícil imaginar vivir sin uno.
El primer abridor de puertas de garaje consistió en un transmisor de radio, un recibidor y un activador para abrir o cerrar las puertas. En él el recibidor podría detectar un cambio en la amplitud y podría abrir o cerrar la puerta. Sin embargo, había una preocupación de seguridad concerniente a este tipo de abridores de puertas de garaje. Podían ser abiertas con cualquier transmisor. También había aberturas accidentales cuando los vecinos querían abrir sus propias puertas. Luego se empezó a utilizar una frecuencia compartida para poder evitar los accidentes de este tipo. Utilizando combinaciones se pudo llegar a un total de 256 posibilidades que podrá prevenir la interferencia de otro tipo de señales. Sin embargo, el problema de la seguridad no pudo solucionarse.
La puerta del garaje de hoy en día utiliza una frecuencia rotativa o código tecnológico variable. En estas, la frecuencia para abrir se ve de antemano, lo que significa que para el momento en que la puerta se abre, la combinación cambia.
La tecnología para este tipo de artículos es simple. Se utilizan tres tipos de métodos, tirados a cadena, tirados con engranajes y tirados con cinturón. Los primeros hacen mucho ruido ya que utilizan cadenas metálicas junto con una rueda de metal. Sin embargo son relativamente baratos, cerca de $130. El segundo tipo consiste en tres eslabones de ruedas. Empiezan en los $150. Los modelos más nuevos consisten en líneas de plástico que reducen el ruido y aumentan la velocidad de abertura. Los tirados con cinturón son los más caros y los más silenciosos. Su valor empieza en $170.
Existen varios errores comunes que la gente hace al momento de considerar la manera abrir una puerta de garaje. Sin embargo, la apertura actual se hace con resortes. Cuando la puerta se cierra los resortes se tensionan. Cuando la puerta se abre, los tensores hacen la mayoría del levantado. Existen dos tipos: resortes de expansión linear y resortes torsionales. Los abridores de puertas de garaje son de dos tipos, a motor y con mesilla de ruedas. El primero ocupa menos espacio. El segundo consiste de una pequeña rueda pegada a la puerta y también al motor. Esto ocupa espacio en el techo, pero es más popular debido a que es más seguro. En el primer tipo, es difícil sentir cuando alguien está siendo aplastado por la puerta. Existen dos tipos de motores disponibles, los de corriente alterna y los de corriente directa. Los primeros son más comunes, pero los segundos tienen más ventajas. Consumen menos energía, su velocidad puede ser fácilmente controlada y hacen menos ruido.
Existen algunos modelos con reversa automática en caso de obstrucción por una mascota o un niño. Los remotos usualmente operan a una distancia de 45 metros y pueden ser utilizados para prender las luces del garaje también. La mayoría de los abridores de puerta del garaje vienen con un tablero, que puede ser instalado afuera del garaje. Éste se utiliza para abrir el garaje, si las baterías del control remoto están agotadas o si el control remoto ni siquiera está. La mayoría de los abridores de puertas de garaje permiten mecanismos de emergencia para que la puerta pueda ser abierta de manera manual en caso de que falle la energía.